El atractivo que tradicionalmente ha tenido la familia de teléfonos Redmi de Xiaomi es indiscutible, principalmente por ofrecer dispositivos competentes a cambio de un precio reducido. La estrategia de la compañía parece funcionar y convencer al público, y por ello el año pasado hubo hasta cuatro teléfonos dentro de la gama Redmi Note 9, y en 2021 la estrategia se repite con cuatro terminales que forman parte de la nueva familia Redmi Note 10.
Tras haber probado y analizado el Redmi Note 10 Pro, llega el turno de contaros nuestras primeras impresiones con el Xiaomi Redmi Note 10S. Un teléfono con una optimizadísima batería pero con especificaciones más modestas que las de su hermano mayor, pero a un precio menor. ¿Sale lo barato caro en comparación? Vamos a verlo.
Luciendo la genética de su linaje
A nivel de diseño encontramos muy pocos cambios entre el Redmi Note 10S y el resto de teléfonos de la gama Redmi Note 10. En mano, es un teléfono grande con una destacable barbilla en el marco inferior y un agujero en pantalla centrado en el marco superior. A pesar de su gran tamaño, y teniendo en cuenta su gran batería, el grosor y el peso del Redmi Note 10S no son para nada exagerados, convirtiéndose en un teléfono cómodo.
La trasera es un calco de lo que ya vimos en el Redmi Note 10 Pro, pero con una mejor integración del módulo de cámaras sobre el cuerpo del teléfono. Se repite la disposición vertical de los sensores, si bien el principal, al ser de 64 megapíxeles y no de 108, tiene un tamaño más pequeño, de modo que quizás por eso han podido evitar que la protuberancia sea tan exagerada como la que vimos en el modelo Pro.
La trasera tiene un acabado brillante, a la moda, pero en general la estética es más bien sencilla. Eso sí, todo lo que tiene de brillante lo tiene también de sucio; las huellas y las motas de polvo copan fácilmente el cuerpo del teléfono, salvo que lo utilicemos con la funda de silicona transparente que viene en la caja.
Los puertos y conexiones tienen la disposición habitual, con el controlador de volumen en el marco derecho junto con el botón de encendido, que a su vez hace función de lector de huellas lateral. En el marco izquierdo encontramos la bandeja, con posibilidad de acoplar dos tarjetas micro SIM (además de espacio para una tarjeta microSD para ampliar el almacenamiento). En el borde inferior tenemos el puerto de carga USB Tipo C, junto con un espacio para el altavoz y otro para una entrada jack de 3,5 milímetros, y por último, en el superior, tenemos otro espacio reservado para otro altavoz.
Después de ver el diseño, vamos a hablar más en profundidad de la pantalla del Redmi Note 10S, tratándose de un panel AMOLED de 6’43 pulgadas con resolución FullHD+. Este conjunto de tecnología, resolución y diagonal da muy buen resultado, como llevamos viendo un tiempo en muchos móviles, y lo mismo ocurre con este teléfono.
Los parámetros de la pantalla parecen venir bien calibrados de fábrica y su esquema de colores en automático da buen resultado. Pero si no estamos satisfechos, MIUI siempre nos da varias opciones para poder configurar los parámetros de la pantalla para adaptarlos a nuestras necesidades.
Pero lo que hemos echado de menos es que haya una tasa de refresco mayor a 60 hercios. Con la tendencia a subirla de muchos fabricantes, en 2021 resulta casi chocante ver que un teléfono de estas características no tiene como mínimo 90 Hz de tasa de refresco en su pantalla, sobre todo teniendo en cuenta que el Redmi Note 10 5G si cuenta con ellos.
A pesar de echar de menos ese extra de fluidez, la pantalla de este nuevo teléfono de la familia Redmi se ajusta a lo que podíamos esperar y podemos disfrutar de ella sin ningún problema. La respuesta a nuestras demandas es buena y creemos que es un buen panel para disfrutar de cualquier contenido multimedia, incluso para jugar a videojuegos. Pero si eres un usuario que busca la fluidez en un teléfono por encima de todo, este Redmi Note 10S se puede quedar un poco corto para ti.
Nubes y claros si lo ponemos a jugar a tope
El procesador Helio G95 de Mediatek es un chip que ya hemos analizado en otros teléfonos como los Realme 7 y Realme 8 y desempeña bien su función, aunque se nos antoja algo justo. La unidad que hemos probado va con 6 GB de memoria RAM y con 128GB de almacenamiento UFS 2.2.
En conjunto, nuestra experiencia con el Redmi Note 10S ha sido favorable y no hemos tenido problemas graves que afecten al funcionamiento normal y habitual del teléfono. La ejecución de todas las aplicaciones se hace sin mayor problema, al igual que el cambio rápido entre unas aplicaciones y otras, aunque sí que hemos notado cierta falta de fluidez en momentos puntuales.
Xiaomi ha cumplido con su palabra de traer MIUI 12.5 en el segundo trimestre del año y el Redmi Note 10S está en la lista de los «privilegiados» que la soportan. Y en este aspecto tenemos buenas noticias, porque después de haber probado esta versión de la capa nos parece que Xiaomi ha hecho un mejor trabajo de optimización con respecto a lo que hemos visto anteriormente, sobre todo cuando la hemos probado en otros teléfonos de la gama Redmi desde los Note 9.
De hecho, decimos esto porque cuando analizamos el Redmi Note 10 Pro aún experimentamos lag y tirones recurrentes, algo que no hemos notado de momento en el Redmi Note 10S salvo por alguna excepción, como hemos comentado. Quizá los 6 GB de RAM se quedan algo justos para mover todos los recursos de MIUI a la perfección.
Además, los 60 Hz limitan la experiencia con videojuegos exigentes, como el ‘Asphalt 9’. Por tanto, es un teléfono relativamente potente, pero que se queda algo justo en cuestión de rendimiento, sobre todo si somos usuarios muy exigentes.
En cuestión de biometría, el Redmi Note 10S queda muy bien, con un lector de huellas lateral muy rápido y que funciona tan solo con posar nuestro dedo sobre el botón. Lo mismo ocurre con el reconocimiento facial, que desbloquea el terminal de forma rápida, siempre y cuando haya una cantidad mínima de luz en la estancia en la que nos encontremos.
Acomodándose en el aprobado justo en fotografía
La cámara es el apartado que la gran mayoría de teléfonos de gama media actuales necesita mejorar. También es cierto que por menos de 300 euros no se puede ser demasiado exigente, de hecho, en esto encaja el Redmi Note 10S: si quieres unas fotos de alta calidad, quizá su cámara no sea la mejor.
Su conjunto de cámaras está formado por un sensor de 64 megapíxeles con lente gran angular, que se combina con un sensor ultra gran angular de 8 megapíxeles con una lente de 118 grados de campo de visión. Estas dos cámaras vienen acompañadas de un pack habitual de un sensor de 2 megapíxeles con una lente macro y otro sensor de 2 megapíxeles para la profundidad, que poco aportan al conjunto, pero que es una combinación muy popular en la mayoría de teléfonos de gama media. Pero mejor vamos a dejar que hablen los resultados, al menos los de esta toma de contacto.
En general vemos que el rango dinámico es bastante reducido, tanto en HDR como en automático. Hay disparos aparentemente sencillos que no se resuelven bien a nivel de detalle y rango dinámico. A decir verdad, las imágenes obtenidas quedan un poco por debajo de las expectativas viendo al Xiaomi Mi 11 Lite (que tiene un conjunto de cámaras muy parecidas). Eso sí, en cuanto a balance de blancos y a colorimetría parece correcto.
El HDR ayuda a recuperar rango dinámico pero es demasiado agresivo. Hay que decidir si salvar un cielo y exagerar los contornos o quedarnos con el automático. La cámara macro sí está sobre lo esperado: permite fotos más cercanas, sin que tampoco sea “un salvavidas” salvo que busquemos algo muy específico. Estas cámaras tienen sensores pequeños que suelen dar fotos con demasiado contraste y saturación según las condiciones, y es algo que vemos también aquí.
El gran angular mantiene la coherencia con el estándar para lo bueno y para lo no tan bueno. Y la buena noticias es que no parece que haya una deformación exagerada por la curvatura.
La cámara frontal se aqueja un poco de la misma falta de rango dinámico y se echa en falta algo de detalle, aunque da resultados realistas y no vemos exageración de contraste o saturación. Eso sí, a contraluces no parece salvar muy bien la exposición de la foto, y puede llegar a quemar las imágenes en algunas ocasiones.
Muy buenas sensaciones con la autonomía
Uno de los apartados en los que más destaca el Redmi Note 10S es en el de la batería, ya no solo por tener una capacidad de 5.000 mAh, sino porque pensamos que está muy bien optimizada. Con la pantalla apagada y sin utilizar el teléfono (por ejemplo, durante 8 horas por la noche), la batería no llega a desgastarse ni un 5%.
Pero sobre todo lo decimos porque al usar el móvil con normalidad el nivel de descenso de la batería es ridículo. A mí el teléfono me llegó con un 60% de la batería cargada y me puse a hacer todas las pruebas con él: descargar aplicaciones, pruebas de rendimiento, navegar por Internet, ver vídeos, redes sociales, hacer fotos, jugar a videojuegos… Y 9 horas después el teléfono sólo se había desgastado un 30%.
Aunque hemos de probarlo en profundidad, nos parecen unos datos muy positivos para este Redmi Note 10S, que hacen pensar que no consume demasiados recursos. De momento hemos experimentado que su batería puede aprovecharse perfectamente a lo largo de un día y medio o incluso dos, sin necesidad de cargarlo.
Este teléfono además cuenta con soporte para carga rápida de 33W, que se pueden aprovechar gracias al cargador que acompaña al dispositivo en su caja. El tiempo de carga de 0 a 100% es de una hora y 20 minutos aproximadamente
La competencia en la puerta de casa
El Xiaomi Redmi Note 10S se plantea como una alternativa más dentro del gigantesco escaparate de teléfonos móviles de gama media que reina actualmente en el mercado. Este modelo ofrece un conjunto más bien ajustado en especificaciones, pero puede ser más que suficiente para aquellos que no necesiten la excelencia dentro de su bolsillo, pensando principalmente en no sacar demasiado dinero del mismo para su compra.
Por un precio que parte de los 269,99 euros, el Redmi Note 10S tiene sus bazas en la pantalla y una gran batería bien optimizada que favorecen su compra. Menos favorables son los apartados de rendimiento y cámaras, que quedan algo justos incluso para tratarse de un dispositivo de gama media.
Así, este modelo S queda Redmi Note 10 Pro u otros teléfonos con un conjunto más ambicioso, como los nuevos POCO X3 Pro o POCO F3 que se medio suben a la gama alta en cuanto al procesador. Pero lo dicho, su relación calidad-precio parece ser buena.
Xiaomi Redmi Note 10S Smartphone 6GB 128GB Teléfono,con NFC,MediaTek Helio G95 Procesador,6.43″ AMOLED DotDisplay,(64MP+8MP+2MP+2MP) Quad Camera,Dual SIM Card,AI Face Unlock Versión Global(Blanco)
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La noticia
Xiaomi Redmi Note 10S, primeras impresiones: una autonomía que promete mucho por un precio muy competitivo
fue publicada originalmente en
Xataka
por
Mario Arroyo
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