Veni, vidi… y traje versiones eléctricas, de gasolina e híbridas.
Esto podría decir Jaecoo sobre su llegada a España y, más concretamente, sobre el Jaecoo 5, el nuevo SUV de la compañía china. Una opción compacta que permite a la firma abrir mercado justo donde más daño pueden hacer. Y es que el mercado del SUV compacto es uno de los más competitivos de Europa. Si no el que más.
La propuesta de Jaecoo, como no, apunta directamente al corazón de las dudas del consumidor europeo. Dos coches que, cada uno a su manera (y pequeño truco) se venderán justo en la frontera de los 20.000 euros.
Ficha técnica del Jaecoo 5
Jaecoo 5
Tipo de carrocería.
SUV compacto de cinco plazas.
Medidas y peso.
4,38 metros de largo 1,86 metros de ancho y 1,65 metros de alto. Distancia entre ejes de 2,62 metros.
1.521 kg de peso para la versión de gasolina.
1.785 kg de peso para la versión eléctrica.
Maletero.
480 litros en ambas versiones.
Potencia máxima.
147 CV en la versión de gasolina.
211 CV para la versión eléctrica.
Consumo WLTP.
7,0 l/100 km para la versión de gasolina, según WLTP.
16,5 kWh/100 km para la versión eléctrica y 402 kilómetros de autonomía, según WLTP.
Distintivo ambiental.
C y Cero emisiones.
Ayudas a la conducción (ADAS).
Obligatorias por la Unión Europea.
La marca refiere 19 ayudas ADAS como control de crucero adaptativo con asistente de cambio de carril y mantenimiento en el mismo. Luces automáticas, frenada de emergencia con alerta de tráfico cruzado trasero o aviso de apertura segura de puertas.
Otros
Pantalla para el cuadro de instrumentos de 8,88 pulgadas y pantalla central de 13,4 pulgadas. Sistema de infoentretenimiento compatible con Android Auto y Apple CarPlay (inalámbrico). Head-Up Display. Cargador inalámbrico de 50 W. Cámara 540º para uso off road. Asientos calefactados y ventilados delante. Volante calefactado. Techo panorámico.
Híbrido eléctrico.
Primeras entregas en 2026.
Híbrido Enchufable.
No.
eléctrico.
Sí.
Versión con 211 CV, batería de 60 kWh y autonomía de 402 kilómetros homologada.
Precio y lanzamiento.
Ya disponible versiones de gasolina y eléctricas.
Gasolina: desde 27.500 euros sin descuentos (la marca adelanta un precio promocional de 19.990 euros)Eléctrico: desde 35.500 euros sin descuentos ni ayudas (la marca adelanta un precio promocional de 19.990 euros en los que se suman descuentos y ayudas)
A las claras
El pasado mes de abril, mi compañero Javier Lacort acudió a China para ir al Salón del Automóvil de Shanghai. Allí pudo ya probar el Jaecoo 5 EV, es decir, al versión completamente eléctrica del SUV compacto chino.
Entonces dijo del coche que era «el SUV que ya no pedía permiso». Ahora, habiéndonos subido a sus versiones eléctricas y gasolina (las híbridas llegarán en unos meses), entiendo a la perfección a qué se refería. «Los acabados, otro síntoma de madurez, apuntan en la misma dirección. No hay lujos, pero sí criterio«, decía entonces mi compañero y creo que esa frase resume en gran medida lo que es este coche.
La compañía pone a la venta estas versiones con un precio de partida de 27.500 euros para la versión de gasolina y 35.500 euros para la versión eléctrica. Pero su lema es otro: podrás tener cualquiera de los dos desde 19.990 euros. El primero con una campaña de lanzamiento que tiene las ideas muy claras: vender lo máximo posible de partida y que el coche se vea, ya habrá tiempo de quitar los descuentos promocionales de salida.
El segundo se aprovecha del Plan MOVES III, pero eso dejaría al coche en, como máximo, 28.500 euros. Por eso la compañía aplica otro descuento al que también se suma Repsol para ponerlo por debajo de los 20.000 euros. Con ese precio, claro, es casi imposible competir.
Y es que el Grupo Chery está atacando con Omoda y Jaecoo a un público que quiere un coche de aspecto moderno por dentro, unos acabados cumplidores y un precio con el que no pueden (o directamente no les interesa) competir los rivales europeos. Entre los 20.000 y 25.000 euros en un tamaño similar al Jaecoo 5 casi todo son propuestas chinas: DFSK, EVO, MG, DR Automobiles… Y las europeas (Citroën C3, Peugeot 2008 o Dacia Duster) no están a la altura en calidad de los materiales utilizados.
Porque, como hemos dicho en otras ocasiones, las marcas chinas están ganando al cliente en el concesionario. Como contaré más adelante, me reafirmo, un Dacia Duster se mueve mejor y es muy probable que consuma menos gasolina. Pero sus plásticos duros allí donde miras y tocas no se pueden comparar con los sutiles acolchados repartidos por las puertas y el salpicadero de este Jaecoo 5.
Tampoco con un acabado que, de partida, llega con una pantalla central de 13,2 pulgadas y resolución 2K, volante multifunción con un tacto agradable (y una fórmula de doble radio en horizontal poco vista), CarPlay y Android Auto inalámbrico y asientos delanteros calefactables, además de hasta 19 sistemas de ayudas ADAS a la conducción.
Por poco más sumamos cuero sintético, ventilación para los asientos, volante calefactable, techo panorámico, maletero eléctrico, equipo de sonido Sony con ocho altavoces, cargador inalámbrico de 50W (con ventilación) y cámara de visión trasera 540º (se puede ver lo que hay debajo del coche), que también llegará al paquete básico en las versiones híbridas.
Dígale a un cliente que viene de un coche con más de 10 años y que en pleno encarecimiento del mercado que no se quede prendido de un interior así. Más si ese coche tiene un precio anunciado a la entrada de menos de 20.000 euros.
¿Y cómo va?
En nuestro caso tuvimos la oportunidad de subirnos a la versión eléctrica y la gasolina en un recorrido de ida y vuelta de unos 140 kilómetros para cada uno de los coches. La inmensa mayoría de este recorrido se realizó en autopista y apenas tocamos carretera secundaria.
Conviene señalar esto porque tendríamos que poner más a prueba el dinamismo del vehículo aunque sí volví con la sensación de que, en esa breve toma de contacto, la versión eléctrica me resultó más placentera e interesante… aunque entiendo que se venderá mejor la gasolina.
La versión eléctrica es mucho más silenciosa y ágil, muy cómoda de llevar para el día a día. Son 211 CV que mueven el coche con gracia para desenvolverse muy bien en ciudad. La batería es de 60 kWh y en nuestros 140 kilómetros el coche consumió unos buenos 18,43 kWh/100 km.
Es una cifra muy aceptable conseguida a un ritmo normal de la vía, circulando en su mayoría a 120 km/h pero sin buscar consumos en ningún momento. Esto es clave porque con estos datos el coche puede realizar más de 300 kilómetros de una sola tirada y eso ya son números muy interesantes para quien se pudiera plantear el coche como único coche en casa.
Además, como puede aceptar 130 kW de potencia de carga, un viaje de más de 500 kilómetros no debería demorarse en exceso si mantiene una buena curva de carga.
En cuanto al modelo de gasolina, el SUV llega con un motor de 1.6 TGDI con cuatro cilindros de 147 CV de potencia. Se combina con una caja de cambios de siete velocidades y cuenta con tres modos de conducción: Eco, Normal y Sport.
Estos mismos modos también están disponibles en la versión eléctrica pero mientras que en esa no aprecié apenas cambio entre unos y otros, en la opción de gasolina sí que la mejoría en el modo Sport es clara.
Con esta opción activada, la respuesta del motor es mucho más rápida pero, sobre todo, el cambio se vuelve más ágil. El modo Normal da la sensación de estar pensado en gran medida para el ahorro de combustible. Con todo, en nuestra ruta se fue a 8 l/100 km en los 140 kilómetros que rodamos con él.
En cuanto a su dinámica, ambos coches son muy similares. En ambos sentí una dirección demasiado artificial. En líneas generales hemos achacado a los coches chinos tener una dirección demasiado blanda. Aquí sucede todo lo contrario. Su sensibilidad está ligada a la velocidad a la que circulamos pero muy pronto se vuelve demasiado «dura». Sin embargo, no es igualmente directa lo que hace que se sienta rara. Es como si presentara cierta resistencia a moverse pero, cuando se mueve, necesitamos meter más volante del esperado.
El coche, eso sí, se siente muy asentado en vía rápida. En carretera secundaria apenas pudimos ponerlo a prueba. En las pocas curvas que tomamos a una velocidad un poco más alta, mi sensación es que el coche pecaba de esa suspensión demasiado blanda y el recorrido hasta asentarse era algo largo y perezoso. Sin embargo, desplaza las masas con seguridad y una vez asentado se siente estable, lo que aporta seguridad.
Los sistemas de asistencia a la conducción se mostraron correctos en la mayoría de las situaciones. No presentó frenadas fantasma o inesperadas y retomó la velocidad de crucero en las aceleraciones con suavidad. El único punto negativo es el de algunas frenadas con cierta rudeza aunque siempre por cruces de terceros en la trayectoria del vehículo sin respetar la distancia de seguridad, en ningún caso por aproximaciones mal atendidas.
En resumen, estamos ante uno de esos coches con los que Jaecoo puede hacer mucho daño. La versión eléctrica lo tiene más complicado si la compañía no mantiene los agresivos descuentos iniciales pero en la versión de gasolina sí puede dar mucha guerra un coche con un equipamiento tan amplio por un precio que de salida está en la frontera de los 20.000 euros.
Y a finales de año llega la verdadera apuesta, la versión híbrida.
Fotos | Xataka
–
La noticia
Subirse al Jaecoo 5 es confirmar lo que ya sospechábamos: el coche «asequible» ahora es chino y llega atiborrado de equipamiento
fue publicada originalmente en
Xataka
por
Alberto de la Torre
.